Me sentía contento en Radio «A» había mucha empatía con los dueños, con los chicos de la radio, junto al maestro Yolvi Traverso eramos los mas «antiguos» del staff, pero una propuesta interesante me hizo pensar, era el proyecto de una nueva radio, era el reencontrarme con muchos compañeros de mil batallas, en fin era tentadora la oferta, no tanto en lo económico, pero era volver a la música en ingles, a la radio comercial, la que podía llevarme nuevamente al número uno, un solo comentario de mi cambio de camiseta, movió el ambiente dentro de la empresa en la que trabajaba, alguien filtró el rumor y de inmediato me hicieron la pregunta de rigor…te vas a ir????, entró en mi la duda, acá me siento muy bien, gano bien, en la nueva radio no me van a pagar lo que gano acá, entonces llegó la propuesta que marcaría mi carrera radial, no sabía que la otra radio del grupo no generaba ingresos, el género que ofrecía no era rentable, tenía sintonia pero no reflejaba las ventas esperadas, el dueño tomó una decisión inesperada, acabar con esa radio….parecía una locura, pero en negocios las decisiones se toman radicalmente, muchos de los que trabajaron en esa radio pensaron(uno sobre todo) que yo era el causante de esa cambio, completamente equivocado, indirectamente se preparaba algo distinto, no había nada planificado, todo ocurrió tan rápido, que no había nada preparado, me quedaba en la empresa, pero con una radio nueva, tenía que reestructurarla y pensar en algo nuevo, así que tomé un descanso, un break para ordenar mis ideas, que estaban confusas, no tenía nada que ver en la desaparición de una emisora que fue competidora de mi anterior radio (Studio 92), pero se me presentó la oportunidad de crear algo nuevo, así que varios días fuera de Lima, plasmaba la radio que siempre soñé ejecutar, una emisora que sea parte del día a día de la gente, que sea cómplice, amiga, compañera, que brinde música que los oyentes compartan, volver a darle al público el fanatismo radial que ya se estaba perdiendo, por que el oyente peruano es muy especial, adora «su música», sea cual fuese el género, tenemos canciones propias, a veces nadamos contra la corriente en preferencias musicales con el mundo, pero nadie dudará que hay un gusto distinto en nuestro país, es así que aparecí en mi nueva radio que no tenía ni siquiera nombre, horas antes preparando la programación que apenas contaba con un 25 % de lo que se conseguiría luego, escrita a mano en una hoja de papel anunciaba que el 8 de diciembre de 1997 a las 6 am, comenzaba esta nueva emisora que se identificaría momentáneamente con el 95.5….

Eso era solo el principio, para mi el mes mas largo de mi vida fue mayo 92, por que recibía todo el peso de Studio 92, una radio grande que entraba en reestructuración, pero aquí era distinto, las ideas llegaban una tras otra, el espectro musical crecía, esta nueva propuesta ya estaba al aire, para mi sorpresa esta nueva radio(95.5) aparecía con encendidos a pocas horas de su debut, ese 8 de diciembre por la plaza San Miguel, la encontré en 4 lugares(ya quisieran algunas aparecer a pocas horas del debut), ese era un buen indicio, empezaba con el pie derecho, no sería una radio retro con temas archiconocidos, acá presentaríamos nuevas propuestas que la gente recibiría adaptándolas a lo que ya escucharon alguna vez, combinándolas con lo clásico que sería devuelto al chip de nuestros nuevos oyentes…

Así empezaría una aventura fascinante con más cosas buenas que malas, con gente que le puso feeling a su trabajo,creativos al 100 %,  locos que amaban la música y no robots ni máquinas que arrojaban un frío resultado ya «estudiado», la radio es pasión, garra, entrega, el amor a lo que uno hace no lo enseña nadie, por eso conseguimos oyentes fieles a una radio que solo quiso devolverle protagonismo al medio de comunicación mas querido por la gente….continuará…..